Deja de aferrarte
a las ideas del pasado, esas que en su momento defendiste. Si sientes que ya no
son válidas, deséchalas, olvídalas y sigue tu corazón.
No permitas, que te hagan daño, reprochándote
tus cambios.
Todo cambia, evoluciona y se transforma, así también
nuestras ideas.
Que nada ponga freno a tus sueños, que nadie detenga tu vuelo, solo tu,
eres dueño de tus alas y solo tu decides adónde quieres dirigirte.